Una fístula urinaria puede ser una abertura anormal entre los órganos del tracto urinario que procesan la orina y la sacan del cuerpo (riñones, tubos uréteres, vejiga, uretra). Las fístulas urinarias también pueden formar una conexión anormal entre un órgano del tracto urinario y otro órgano cercano, como la vagina o el colon. Las conexiones vagina/órganos urinarios a menudo se denominan fístulas vaginales.

Esencialmente, una fístula es un agujero en la vejiga, vagina u otro órgano que permite que la orina, las heces u otra materia pasen donde no debería. El resultado pueden ser heces y orina que se filtra de la vagina debido a esa conexión anormal.

Numerosos tipos de fístula son posibles:

• Se abre una fístula vesicovaginal entre la vagina y la vejiga. Este es el tipo más frecuente de fístula urinaria en las mujeres. Esto ocurre con mayor frecuencia debido a una histerectomía previa. A veces, un trabajo de parto difícil puede causar una fístula vesicovaginal.
• Se abre una fístula enterovesical entre la vejiga y el intestino. Esta es otra de las fístulas urinarias más comunes.
• Se abre una fístula vesicouterina entre la vejiga y el útero.
• Se abre una fístula ureterovaginal entre la vagina y el uréter (el tubo que transporta orina entre los riñones y la vejiga). La mayoría de las fístulas ureterovaginales ocurren debido a una histerectomía previa u otra cirugía pélvica.
• Una fístula urerovaginal se abre entre la vagina y la uretra (el tubo que saca la orina del cuerpo).
• Se abre una fístula colovesical entre la vejiga y el colon.
• Se abre una fístula rectovaginal entre la vagina y el recto.

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